Hoja de promo "El perro es mío".

Os dejo la hoja de promo del disco nuevo escrita por Andrés Perruca, con un "track by track" al final escrito por mí.


“El Perro Es Mío”, nuevo disco de Francisco Nixon, sale a la venta el 23 de marzo y contiene una excelente y variada colección de canciones que refulgen gracias a unas melodías, unas letras y unos arreglos que dan la razón a los que piensan (pensamos) que, hoy en día, una buena canción pop no tiene porqué estar compuesta para que sobre todo la entiendan (y disfruten) los niños de 5 años.

La grabación tuvo lugar entre agosto y septiembre de 2008 y el laboratorio sonoro elegido fue, al igual que sucedió con la primera referencia de Nixon (“Es Perfecta”, Siesta 232, 2006), el estudio que el eminente Paco Loco tiene en El Puerto de Santa María. Como suele ser habitual, el propio Paco Loco se ocupó no sólo de la producción sino también de muchos de los arreglos, guitarras, bajos, percusiones… una colaboración que Fran Fernández encajó con sumo agrado ya que sabe muy bien, y desde hace mucho tiempo, que las cosas salen mucho mejor cuando uno cuenta, como diría Ringo Starr, “con la ayuda de los amigos”. Corrobora esta idea el hecho de que en el disco no sólo encontramos canciones de Fran, ya que la otra mitad del Proyecto Nixon, Ricardo Vicente, también ha aportado composiciones propias que además él mismo interpreta, cuida, pule y da esplendor.

Y es que bien podríamos decir que Francisco Nixon está formado por un atípico dúo en el que conviven dos Quijotes -o dos Holmes- que no necesitan de Watson o Sancho Panza alguno que les ponga los pies en el suelo. De eso ya se ocupa el (muchas veces demoledor y aburrido) día a día, y si de algo estamos necesitados es de imaginación, esperanza y buenas canciones. Y de todo ello anda más que sobrado “El Perro Es Mío”.

La primera vez que pensé que Fran tenía talento fue a principios de los 90 (todavía no nos conocíamos) cuando, en mitad de una entrevista a Australian Blonde, a la manida pregunta de “¿cómo os formasteis?” contestó algo así como: “Ya sabes, cada uno en el vientre de su madre”. Una respuesta que en boca de un punk podría haber sonado bastante agresiva pero que pronunciada con ese dulce y pausado acento que tienen los asturianos no dejaba de tener una connotación tan ingeniosa como entrañable.

Luego vendrían muchas más muestras de su talento (me refiero sobre todo al compositivo, pues tanto el humano como el intelectual no vienen al caso y me los guardo para mí) gracias a las canciones de Australian Blonde, La Costa Brava (precisamente, las primeras composiciones que estaban destinadas a Nixon terminaron desperdigadas -pero felices- en las primeras grabaciones de La Costa Brava, ya que el gran salto que condujo a Fran Fernández a cantar en castellano coincidió en el tiempo y en el espacio con el encuentro con -el añorado cada día- Sergio Algora) y, por supuesto, de Francisco Nixon.

Precisamente, Sergio Algora me dijo un soleado día del siglo pasado que si uno aguantaba más de diez años en “esto de la música” acababa llegando su momento. Evidentemente, no se refería a la calidad de la música, sino al (necesario) reconocimiento que todo buen artista necesita y merece. Pues bien, yo, sinceramente, creo que el momento de Fran Fernández ha llegado y las canciones de “El Perro Es Mío” son, sin duda, una buena muestra de ello.

Por supuesto, entre los temas que conforman el disco yo tengo mis favoritos, pero, una vez más, me los guardo para mí, ya que seguramente no coincidirán ni con los preferidos por los propios autores ni con los que cada uno de los receptores pueda elegir para pasar una tarde, levantar un día, tirarlo abajo, dar carta libre para que revoloteen las melodías por la cabeza sin descanso durante meses o, simplemente, para permitir que esas canciones se entremezclen con su biografía de forma permanente. Después de todo, ¿no es de eso de lo que trata el pop?

No me alargo más y os dejo con unos breves comentarios sobre cada canción, obra del propio Francisco Fernández:

Andrés Perruca”




Inditex (2:32)
Hasta el último momento dudé en hacer el vídeo de esta canción o de Erasmus Borrachas. Me gusta mucho la armonía de la estrofa, creo que está muy trabajada. La letra surge de una canción muy antigua que nunca llegué a grabar y que decía algo así como "Trabajas en el centro comercial, cerca del stand de Toys’R’Us", etc. Luego tocando en Galicia conocimos a un chico cuya novia trabajaba en Zara, y utilicé ciertos detalles que nos contó para terminarla.
Erasmus borrachas (2:53)
Es la canción que iba a dar título al disco y el soporte del primer vídeo. Son recuerdos de la vida universitaria. La música está influenciada por Love y los Brincos, intentando dar cierto toque flamenco.
Museo Británico (2:34)
Es una de las canciones de Richi que más me gustan, aunque sospecho que él no piensa lo mismo. Me sorprende la habilidad que tiene para meter versos largos y crear metáforas visuales. "Puedo invitarte a dormir en mosaicos del Museo Británico" es uno de mis versos favoritos del disco.
Nombres y teléfonos (2:50)
De vez en cuando intento hacer canciones en plan Prefab Sprout o Style Council y siempre fracaso. Sin embargo son fracasos que me resultan agradables de escuchar, de una tristeza especial.
Los viajes de Simbad (3:02)
Me gustaría hacer más canciones de baile, pero es un terreno en el que me siento bastante inseguro. La canción en principio iba a ir para Australian Blonde, pero la acabé metiendo en el disco de Nixon porque pensaba que necesitaba alguna canción animada. La letra es un tanto impresionista, cosa que intento evitar. Los papapás continuos están copiados a Yo La Tengo. Supongo que nunca la tocaremos en directo.
Mereces toda mi atención (2:50)
Me gusta mucho Peret, y llevaba tiempo intentando grabar una rumba. Espero no haberlo hecho demasiado mal. La letra, de nuevo, es un tanto vaga. Pero es que hacer letras para canciones de baile es muy difícil.
Notre Dame (4:10)
Otra canción de Richi con versos largos e imágenes visuales. Un día le pregunté qué quería decir con lo de "Dos pelícanos van de la mano ante la autoridad" y me dijo que lo había sacado de la película 12 Monos, cuando los animales del zoo vagan por un NY despoblado.
Traficando (2:45)
Esta canción intenta ser un cruce entre las letanías acústico-sinfónicas de Hidden Cameras y "Arponera" de Esclarecidos. Tampoco es de mis mejores letras.
Brackets (2:21)
Esta canción me gusta mucho. En parte viene de aquella canción de Barrio Sésamo: "Yo y mi Llama, pues Llama se llama, vamos a la clínica dental". Pensé que si fuera una chica con brackets me gustaría que me dijeran que a pesar de todo estoy guapa. Fetichismos aparte.
Reactor nº 4 (3:05)
Una vez le comenté a Richi lo impresionante que había sido lo de Chernobil, y a la semana siguiente me vino con esta canción. Richi está enganchado a los documentales, y en pocos días ya sabía más que yo sobre el tema. Me gusta mucho el verso "Dicen que ha estallado el reactor, el número 4 ha volado, y ahora es otro sol".
Cruzando la calle (3:01)
Esta podría ser perfectamente una canción de Australian Blonde en castellano, es decir, imitando a Teenage Fanclub en castellano. Me gusta el crescendo del final. La letra no es nada del otro mundo pero es muy sentida.