"Ha existido modestamente una especie de dicotomía entre la literatura como medio y la literatura como un fin. Ha habido una época en que muchos escritores daban por sentado, en previa reflexión, que la llamada literatura seria debía emplearse en fines de rendimiento práctico. Ibsen, Brieux, Tolstoi, Hauptmann, han practicado de esta suerte la literatura muchas veces. Wells confesaba a Henry James que prefería que le calificaran de periodista antes que de artista. Bernard Shaw ha declarado no interesarle Shakespeare, porque nunca había escrito una comedia con el objeto de deshacer un abuso social, y recientemente, con motivo del centenario de Keats, se ha dignado a aceptarle como gran poeta, porque en Isabella ataca el sistema capitalista. Aunque sus adalides perseveren en ella, esta opinión no es sostenible hoy en día."
Edward Shanks, citado por Ramón Pérez de Ayala en "Más divagaciones literarias".
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