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jueves, junio 02, 2011

La crítica de la crítica pura.


La crítica debe formar e informar, y salvo excepciones, la mayoría de las veces no va más allá de una reseña en la que alguien se explaya sentimentalmente con motivo de la salida de un disco. Que está muy bien (yo me leo todas las críticas de discos que puedo, y me divierten un montón), pero eso lo hace cualquiera. No lo digo en plan despectivo, constato el hecho de que últimamente todo el mundo parece verse en la necesidad de exteriorizar sus preferencias y rechazos, aun en las cuestiones más nimias. La gente no se guarda nada.

¿Qué modelos utiliza la crítica? ¿Cual es su tecnología y su ideología?

¿Qué queremos ser?

¿Importar o exportar?

(P.D. ¿Hasta qué punto he elegido mis gustos libremente o me han sido impuestos?)

(P.P.D. Lo que quiero decir es que si uno se limita al "esto me gusta, esto otro no me gusta", pues no hay nada que añadir, ¿qué vas a responder a eso? Sin embargo, cuando el crítico tiene que exponer las ideas que alimentan sus opiniones, se expone a su vez a la crítica de su sistema, el que lo tenga. Y eso ya no gusta tanto. Por eso la mayoría de las veces la ideología va implícita, como por ejemplo en las frases "los grupos españoles son muy malos", "los grupos españoles que cantan en inglés son muy malos", "los grupos que suenan en los 40 principales son muy malos", "los grupos españoles son muy feos y cantan mal", etc.)

2 comentarios:

Anguis Kokens dijo...

Y aprovechando que el Pisuerga pasa por el Valladolid (donde fuman más las abuelas):

http://vimeo.com/user7177207/videos

Sinceramente y sin guardártelo. Qué te parece esto como casi parodia? Lo digo casi en serio!

Sería sensacional que las críticas sólo vinieran por petición expresa con porfavores incluidos, verdad?


Con amor:

Anguis Kokens

Salava dijo...

Estamos en la época de la crítica Low Cost, en la que todos opinamos de todo porque tenemos boca (o adsl).